
14 Ago Quiero permutar una vivienda: ¿cómo se hace?
¿Te interesa permutar una vivienda? Es decir, ¿cambiar una por otra? Aunque esta práctica no es muy habitual en nuestro país, debes saber que puedes cambiar de casa sin necesidad de realizar una compraventa. Veamos cómo.
Cómo permutar un inmueble
El artículo 1538 del Código Civil establece que la permuta es un contrato en el que cada una de las partes entrega un bIen a cambio de recibir otro. En el caso de una permuta inmobiliaria, cada propietario puede, por ejemplo, intercambiar su vivienda.
Y te preguntarás, ¿qué ocurre si el valor de una supera al de la otra? Normalmente, una de las condiciones es que las viviendas o inmuebles tengan un valor similar. Pero si esto no es posible y se quiere realizar la permuta, habría que compensar esa diferencia con dinero. Y estaríamos ante un contrato mixto de permuta y compraventa.
¿Cómo se realiza?
Lo primero, pasa por acordar el precio de cada una de las viviendas.
Luego, hay que firmar una escritura de la permuta frente a un notario, para así realizar la transmisión de la titularidad de cada una de las viviendas. Por último, se inscribe la transmisión en el Registro de la Propiedad.
Pero es importante no lanzarse a la piscina y comprobar varias cosas antes de permutar. Por ejemplo, si
- el titular es quien dice ser y si
- hay alguna carga asociada a la vivienda;
- gastos de la comunidad impagados,
- una hipoteca,
- IBI al corriente de pago, etc.
¿Hay que pagar impuestos
En la permuta de viviendas hay algunos gastos a los que deberás hacer frente. Principalmente, los aranceles del notario y del registro.
En materia de impuestos, habrá que abonar el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales y el de Actos Jurídicos Documentados. También la plusvalía municipal por lo que se haya revalorizado la propiedad que vendes. Luego, la ganancia o la pérdida de patrimonio del IRPF.
Así que, como ves, al fin y al cabo la permuta es similar a la compraventa en materia de trámites, gastos e impuestos. Pero al no haber intercambio de dinero, se suelen tasar en menos de lo que vale y al final se ahorra en impuestos.
Es complicado encontrar una buena permuta, pero ahora ya sabes cómo se hace. ¿Qué te parece? ¿Te convence esta opción?
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